Proyecto de restauración de los espacios comunes del edificio de apartamentos Seximar, en Almuñécar (Granada).

Los pasillos de distribución giran en torno a un patio central en el que se eleva el arranque del cerro del castillo medieval de la localidad. El núcleo de escaleras y ascensores aparece incorporado a los pasillos en su parte central. Esta disposición genera un bello espacio  en torno a un jardín común que asciende por las rocas.

La demanda del proyecto surge prioritariamente para la renovación de los materiales envejecidos tras 30 años de uso. Las antiguas carpinterías y barandas de acero se sustituyen por elementos de aluminio con lacado especial de protección para lugares costeros, con el fin de garantizar su resistencia a la oxidación. Para las solerías se propone un pavimento continuo que pueda adaptarse con facilidad a los irregulares ángulos de los pasillos, reduciendo costes y procurando un acabado más perfecto, al evitar la multitud de juntas de un pavimento convencional por piezas.

Los revestimientos de estuco aportan una mayor ligereza visual y mejores prestaciones en cuanto a durabilidad y limpieza.

La gama cromática, luminosa y neutra, amplía visualmente el espacio y otorga mayor protagonismo al jardín.